19/12/11

Parón

¡Buenas a todos!

Siento decir que voy a tardar en escribir la próxima entrada. Estaba preparando una que creo que os va a gustar, pero se me ha echado el tiempo encima. Tengo que acabar trabajos, preparar el viaje a Corea (hoy me he dado cuenta que solo queda una semana) y me están surgiendo muchos planes con la gente que obviamente tengo que aprovechar (no estoy diciendo que no a casi nada).

Estoy bastante bien. Ya me he acostumbrado al frío, noto que mejoro por días en lo que se refiere al japonés, y estoy cogiendo muchísimo cariño a la gente de aquí (antes lo pasaba muy bien con ellos, pero no dejaban de ser conocidos).

Supongo que escribiré algo antes del viaje a Corea, aunque sea para comentar mi itinerario y poco más.

¡Un abrazo muy grande y espero que hayáis "disfrutado" del discurso de investidura! (Yo me lo he escuchado enterito mientras hacía secciones de Blasco Ibáñez...)





11/12/11

Aerosmith

¡Muy buenas! Al fin he encontrado un rato para escribir. Esta semana he tenido mis tres exámenes finales de japonés (gramática, comunicación y kanji), después de estudiar en 2 meses lo equivalente a un año de japonés en Valencia. Además de las reuniones para hablar del proyecto, y salir muchísimo.

El fin de semana pasado salí en plan tranquilo, con Adriano y David, y agradecí el hablar en español por un rato. El viernes fui al mercado de Navidad alemán que han puesto en Odori (ese gran parque a lo Blasco Ibáñez), porque Munich y Sapporo son ciudades hermanas, pero había poca cosa. Al final fuimos al cine, a ver Tintin en 3D (que tenía muchísimas ganas), pero para que no os quejéis de lo caro que está el cine en España, que sepáis que me costó 22€ la entrada. Al otro día, me volví a encontrar a David y Adriano al salir de la piscina y fuimos a tomar unas cervezas por la zona. Como curiosidad, probamos el sashimi de caballo (que tampoco tenía un sabor muy especial, pero me hizo ilusión probarlo).

Durante la semana, aunque estaba con los exámenes, decidí no preocuparme demasiado. Por un lado, la clase de gramática es muy fácil (ya estudié estos temas en Valencia), comunicación no voy a seguir dándola, así que no me importa suspenderla (y además no es algo que se estudie en el último día, pues es un examen oral), y Kanji no es examen final, así que tampoco pasa nada. De todas formas me salieron bastante bien.

Kai-kun y Meruba-kun a la izquierda, 'senpai' a la derecha
Por eso, cuando el martes me dijeron de salir con los del laboratorio y los "senpai", no lo dudé ("senpai" significa algo así como "superiores". Son aquellas personas a las que se les habla con el lenguaje de respeto, y simplemente usan esa palabra para referirse a los ex-alumnos que ya se han graduado).


Fuimos de nuevo a un típico restaurante japonés, al estilo de la fiesta de bienvenida, con paredes de papel y comida tradicional. Vino hasta Ozawa-sensei, y lo pasamos muy bien. Todo el mundo se presentó, pues no todos se conocían, y todos hacían alguna gracia (yo me presenté en japonés pero no se me ocurrió nada gracioso que decir con el poco japonés que sé). Un momento muy divertido fue cuando le tocó hablar a Ozawa-sensei. Él es de Kobe, muy cerquita de Osaka (donde vive con su familia y a donde vuelve cada fin de semana). Esa zona de Japón se llama Kansai, y es algo así como la Andalucía japonesa: una zona con muchísimo acento, con muchas palabras y dichos que ahora usa todo el mundo fuera de Kansai, y la mayoría de cómicos son de allí, así que se espera que si alguien es de Kansai sea bueno contando chistes y haciendo gracías. Por eso, cuando le tocó hablar, todos bromearon con lo de Kansai, y al final no defraudó a nadie (no sé muy bien lo que dijo, pero todo el mundo acabó riéndose bastante)

Taka-kun y Konno-kun haciendo los tontos con vainas de 'edamame'
Acabada la cena, fuimos a por el 二次会 (nijikai), que ellos mismos traducen al inglés como "second stage" o "segunda etapa". Básicamente, como en casi todos los sitios hay límites de tiempo para beber y comer, miden cómo de intensa ha sido la noche según por cuantas etapas has pasado (por ejemplo, si en España empiezas en bar de tapeo mientras tomas unas cervezas, luego ir a un pub y luego a una discoteca, y diríamos que fueron 3 etapas. Aunque no es exactamente lo mismo). Es algo muy arraigado, hasta el punto de que cuando te van a dar un "flyer" de algún lugar, te preguntan en qué etapa estás. Ayer, por ejemplo, no nos dieron un "flyer" porque íbamos a la segunda, y era un sitio que nos recomendaban para la tercera... aunque no entiendo muy bien la diferencia. Pues el martes acabé con Konno y Takahiro en la tercera (三次会 o sanjikai), y volví a casa sobre las 4 de la mañana (tened en cuenta que empezamos a cenar a las 6 de la tarde...).

Ya hablando de este fin de semana, el viernes fui a una fiesta en un restaurante dominicano, si no me equivoco, invitado por David. Cenamos tacos, bebimos coronitas, y bailamos música latina de todo tipo. Se vino Daniel, y nos encontramos allí con Kira y Mary Carmen, una venezolana y una mexicana que realmente animaro muchísimo la fiesta (aunque casi todos los japoneses que habían allí iban a clases de baile latino, así que tampoco se quedaban cortos). Lo pasé muy bien, porque es lo típico que vas sin demasiadas expectativas, con la intención de estar una hora y volver pronto a casa, pero acabas pasándolo genial.

Y lo mejor, sin duda, fue el día ayer: el conciertazo de Aerosmith. Primero quedamos a comer unos pocos, para ir desde allí al concierto. Al final nos juntamos 10 personas, de 9 nacionalidades diferentes, todos con muchísimas ganas de pasarlo genial. El concierto fue espectacular: 2 horas y media, muy buena acústica, y el grupo dándolo todo porque, a parte de que son buenísimos en directo, era el último concierto de la gira en Japón, así que fue como una despedida. Además, tuvimos la suerte de que no se vendieron todas las entradas, y nos movieron de nuestro sitio porque habían asientos libres unas 30 o 40 filas delante. Steven Tyler nos sorprendió por lo "jóven" que estaba y lo bien que se conservaba... aunque luego caímos en la cuenta que en realidad lo que pasa es que está así de "viejo" desde hace más de 20 años... (de todas formas, el tío, con sus 63 años, cantando y moviéndose como si tuviese 30... impresionante).

Imágen del concierto (sacada del Facebook de Kai)
En realidad, el tener asientos numerados, acabó estando muy bien. Llegamos al Sapporo Dome 30-40 minutos antes del concierto, sin colas, y acabamos de pié pero con suficiente "espacio vital". Delante del todo parecía que lo seguían más, pero en nuestra zona los japoneses no cantaron ni el estribillo de "Don't wanna miss a thing"... eso si, no dejaron de hacer palmas al ritmo de la música ni se sentaron en un solo momento (algo que sí tuvimos que hacer los "guiris" en algún momento).

Después del concierto fuimos a un karaoke a hacer tiempo hasta que nos diesen una mesa para 11 en un sitio para cenar y beber (porque se fueron algunos pero se unió más gente que no vino al concierto), y claro, algunos compraron algo de comer en un konbini, pero otros no lo hicimos, y aunque las bebidas son muy suaves, con el estómago vacío a algunos nos subió bastante... pero bueno, ninguno nos pasamos, y estábamos todos de muy buen humor. Todos nos despedimos con la sensación de haberlo pasado genial (para mí una de las mejores noches desde que vine), y ya estamos pensando cuando repetimos. Los japoneses, que tenía miedo de que les costase integrarse por las dificultades del inglés, se lo pasaron también genial. Así que fue un fin de semana redondo.

Esta semana me tengo que poner ya a terminar algunos trabajos que tengo que tener listos antes de Navidad y casi no he tocado, y tengo que ir a la oficina de inmigración a por un permiso de reentrada (tengo que pagar unas tasas para no perder mi visado al ir a Corea, pues una vez que sales del país se supone que el visado caduca, pero no si haces este trámite). Por lo tanto, creo que tardaré en volver a escribir.

Un saludo a todos. ¡Disfrutad de vuestros 15ºC, que hace unos días llegué a ver un -7ºC cuando volvía de la piscina!