27/1/12

Kansai, fin del viaje (y vuelta al frío)

Bueno, escribo muy rapidito lo que me dejé pendiente: visitas express a Nara y Kyoto.

NARA
Nara fue la primera capital permanente de Japón. Se dice que la cultura actual del país, sobre todo la fuerte influencia China, entró en este momento. Es una ciudad muy pequeña, pero con dos edificios interesantes: una pagoda de 5 plantas, y un templo, Todai-ji o "Templo del este", que alberga una estatua de un buda de más de 400 toneladas de bronce. Cualquier foto que ponga no hace justicia. Eso sí, la zona extremadamente turística. Os dejo una foto del templo:


¡Ay perdón! Que se me ha puesto un cervatillo delante al echar la foto. Voy a intentarlo de nuevo:


Ah, ahora sí. El edificio es una de las mayores estructuras de madera del mundo, pero ha sido destruido y reconstruido muchas veces, y se dice que llegó a ser 5 veces más grande (imagino que hablan todo el rato de extensión, porque aunque es grande, hay estructuras de madera mucho más impresionantes.

Al final, la capitalidad se trasladó a la relativamente cercana Kyoto porque el clero estaba tomando mucha fuerza y uno de los sacerdotes estuvo a punto de hacerse con el poder del país tras seducir a una emperatriz.

KYOTO
En la visita con los profesores, a penas pude ver mucho de Kyoto, así que después de Nara, volví corriendo a Kyoto. Quería visitar Chion-in, cuyo mayor atractivo es la gran puerta de entrada (la mayor de Japón) y la empinada escalinata de entrada, además de ser menos turístico. El problema: cerraban a las 3:30, y llegué de milagro. Aunque estaban en obras por dentro, que era una pena, me gustó que usaban el edificio de verdad, y había un monje rezando. A ver si puedo subir el vídeo cuando tenga más tiempo.

 

En realidad, si os fijáis, los templos se llevan poco entre sí. Como dije, acabo valorando más la operación urbana que el edificio en sí, en los que básicamente se siguen unas normas sin a penas variaciones, algo así como en los templos griegos.

De allí, fui también con mucha prisa al pabellón de Oro, que cerraban a las 5. El problema es que el metro no llega hasta allí, y para coger el lentísimo autobús tenía que volver a la estación, y me quedaba solo alrededor de 1h. Así que me fui a la parada de metro más cercana, a algo más de dos kilómetros del templo, y empecé a buscar el templo por mil callejuelas, con un mapa diminuto en el que solo estaban las avenidas. Después de un cuarto de hora andando, veo que no reconozco nada, así que paro a una abuelita y me dice: "Uy, no, no es por aquí.. estás muy lejos. Te queda más de media hora (y ya eran las 4:30) así mejor que vuelvas mañana en autobús"... Así que decidí darme la vuelta, y dejarlo para otro viaje a Japón... pero justo al hacerlo vi unos árboles detrás de unas casitas y reconocí que era un parque del mapa. Al final, tras darme mucha prisa, llegué 10 minutos antes del cierre, y aunque lo vi corriendo, mereció la pena.


El edificio en sí, como no, es una reconstrucción (un joven monje rebelde lo quemó en 1950, y se reconstruyó 5 años más tarde). Pero el lugar en el que está situado es increíble, jugando todo el rato con los reflejos en el agua y con un recorrido que va girando alrededor del edificio, medio oculto por los árboles, para acabar saliendo por detrás subiendo unas colinas por unos caminos serpenteantes. Me quedo con ganas de volver y verlo con más calma, pero mereció la pena la paliza de ir hasta allá (además, es un lugar siempre congestionado con turistas, pero entre la hora y la lluvia, estaba muy agradable de visitar).

--

Por último, os dejo dos fotos "de regalo": una, el edificio que tanto me gusta, que pude volver por la mañana antes de coger el vuelo y creo que la otra foto no le hacía justicia; y por supuesto una foto del impresionante aeropuerto de Kansai. Perdonad la calidad pero estaba muy muy nublado y es lo mejor que he podido sacar al "limpiarla". Además, ahora que he vuelto desde un clima "normal", los -9ºC de estos días me parecen más duros que nunca (de hecho, en Internet y en los 'smartphones' estamos viendo hasta -22ºC, pero no he llegado a verlo por mí mismo en la calle)



Me dejo algunas reflexiones sobre Japón a raíz de hacer este viaje, pero lo dejo para otro momento. Este fin de semana lo tengo muy ocupado (¡¡mañana toca snowboard!!), pero a partir de la semana que viene me quedo muy libre ¡así que aprovecharé para contar muchas cositas pendientes!

4 comentarios:

  1. ¡Que bonita mañana! Leyendo tu entrada mientras escucho el fado del nuevo disco de Pablo Alboran , me parecia estar recorriendo contigo el parque bajo la suave lluvia que se ve salpicando el lago , ¡Te podrias ganar la vida escribiendo te lo aseguro !
    Gracias

    ResponderEliminar
  2. jajajj me mata el truco del cervatillo! ¿cómo lo has hecho? ¿y la foto de tu querido edificio? ¡está perfectamente vertical! impresionante.

    ResponderEliminar
  3. Antonio José28/1/12, 15:38

    Tu penúltima foto me recuerda a cierta optativa.

    ResponderEliminar
  4. Cervatillos comedores de mapas!! xDDD ¿Te llegaron a robar algo o tu te libraste? Jajaja!!

    Ya veo que exprimiste al máximo el viaje ^^ Me alegro!! Jejeje!!

    Espero que te lo estés pasando bien haciendo snow este finde!!!

    ResponderEliminar